lunes, 14 de enero de 2013

Nostalgia (I): Star Trek - New Worlds

¡Phasers al 100%! ¡Que comience la fiesta, muchachos!
Año 2000. Nos encontramos en la época dorada de los videojuegos 3D, los millones de polígonos y los experimentos rarunos en una transición de dimensiones que parece más bien ensayos hechos a prueba y error. Consecutivos y secuenciales testeos. Tanto por suerte como por desgracia, la transición de dimensiones ha dejado tanto malformaciones como auténticas joyas dignas de un estante y, creo humildemente, que nadie puede quejarse en absoluto. Estamos hablando de la gran época donde yo, gamer locuelo y ñub con más luces que una feria, empezaba a dar mis primeros pasitos en el mundo del PC.

Sabemos que en esas fechas, el mundo de la estrategia en tiempo real (o RTS de ahora en adelante) estaba bastante bien surtida. Juegos como Age of Empires II, Starcraft, Warcraft II, Command & Conquers, Total Annihilation... azotaban el género con muy buenos resultados y eran bastante aclamados. Hasta ahora. La época transitoria de las dimensiones estaba dándose lugar, cual roca a lo Indiana Jones. Imparable. Revolucionaria. Evolutiva.

Justo en esos momentos, cuando me adentraba oficialmente en el fantástico mundo del PC, ávido de páginas especializadas y ganador de un master en bajar demos de todo tipo... me encontré con un juego muy especial para mi. Es quizá, uno de los muchos detontantes por los que me decanta más el género RTS ante cualquier otro habido y por haber. "¡Star Trek - New Worlds!", leí. "¿Pero si a mi Star Trek ni me va ni me viene?", pensé.


Cuando vi por primera vez este video, justo al iniciar el juego, mis huevos cayeron de tal manera al suelo que creí oír piar unos pollitos. Realmente me estaba llamando la atención preocupantemente. El caso es que la demo apenas tenía 2 misiones (o mapas) por los que lucir. El primero de ellos era más bien un tutorial para hacerse una idea con el juego, mientras que el otro era una misión bastante avanzada con su incremento de dificultad moderada. ¡Y vaya demo! ¿Quién imaginaria que una demo con 2 simples mapas me daría tantas horas de diversión y me duraría instalado la friolera de MESES en mi potato PC?



· Historia:
Realmente la historia no importa en lo más mínimo. Estamos hablando de hace 12 o 13 años atrás, por lo que la imaginación junto a lo que uno veía del juego ya se montaba sus propias paranoias y conspiraciones. En sí, lo que ocurre es que los Romulanos, haciendo una especie de experimento en pleno espacio abren un agujero de gusano que los conducen tanto a ellos como a la Federación y a los Klingon hacia otra galaxia lejana, dejándolos amparados ante nuevos mundos. De ahí la coletilla New Worlds. Nuevas civilizaciones por descubrir, el encuentro con especies tanto amigables como hostiles, peligros acechando, retos danielescos casi imposibles y nuevos asentamientos por los que luchar. Tan básico como eso. Cada facción tiene su objetivo clarificado: La Federación está encantada con el descubrimiento de los nuevos planetas y abre sus brazos hacia la nueva especie alienígena que habita en ellos, los Taubat. Mientras tanto, los Romulanos andan con pies de plomo y no se fían así como así de nadie. Sin embargo, los Klingon van a por todas y quieren arrasarlo todo para quedarse parte del pastel.

Realmente no recuerdo si era tal que así, pero más o menos os podéis hacer a la idea.

· Jugabilidad:
El juego nos representa el típico esquema RTS por excelencia. Construye tu base, recolecta recursos, produce unidades y cumple con tus objetivos. Ya sea por las buenas haciendo ciertos deberes o arrasando a tus enemigos, la apuesta es bien sencilla. Durante las misiones nos van a encomendar ciertas tareas que deberemos cumplir y así proseguir con la historia, desbloqueando nuevas misiones y destapando qué demonios ocurre. Los controles son sencillísimos. Al ser un juego 3D, tenemos la posibilidad de girar la cámara, acercar o alejarse, así como de subir o bajar en altura. Vamos, control total sobre nuestra visión en el campo de batalla. Es una auténtica delicia.

· Gráficos:
Como decía, el juego está en completo 3D. Es uno de esos juegos que les tocó pasar por la "infame" transición de las 2D a las 3D. El nivel de detalle y la cantidad de polígonos en su momento estaba bastante bien. Los efectos y las explosiones no tenían desperdicio y el trabajo visual te puede entrar por los ojos cual pizza recién hecha. Muy placentero. El completo control de la cámara hace que todavía se pronuncie mucho más el buen trabajo en los modelados, las texturas y sobretodo los detalles. Te da realmente la sensación de poder ir hasta más allá del terreno jugable y ponerte a explorar todo el planeta si pudieras, esperando encontrar a-saber-qué.

· Música:
La banda sonora de fondo es muy destacable. También es muy Trekkie, por lo que los fans de la franquicia pueden estar descansados. Cumple y mucho. Realmente ya con el trailer del juego uno se hace a la idea de lo que está por devenir. Añado que la música es progresiva y dinámica, por lo que si en algun momento, por ejemplo, nos están atacando u ocurre algún evento importante, cambiará y eso nos alertará. Muy decente y casi inolvidable.

· Dificultad:
Estamos hablando de un RTS. La verdad es que el juego en este apartado está bastante bien balanceado, pero si no eres un habitual es posible pasarlas muy amargas. El juego tiene varias dificultades, todo en función de a qué facción elijas. La Federación tiene la dificultad más baja, los Romulanos dificultad media y dejamos a los Klingon con una dificultad bastante elevada. No solo eso, los diferentes tipos de mapas y misiones también van a influir bastante en el desarrollo. Una cagada o uno de los mapas más avanzados y puedes vertela negra por cumplir con tu objetivo.

Un detalle bastante jodido, es que este juego ADOLECE de no tener un maldito SAVE GAME. Sí, no tiene para guardar la partida. Por lo que si no fuera poco tener misiones jodidas, las partidas pueden durar entre 30 minutos y 1 hora en cumplirlas, añadiendole ese pequeño-gran handicap a la susodicha dificultad.



· Conclusión:
Así pues, nos encontramos ante un RTS salido de una época un tanto discutible, pero que en general cumple con todos los puntos y que para mi es y será un clásico en el género. Amado por muchos y odiado por otros tantos, este juego podría haber sido mucho más (sin duda), pero que tal como está no deja de ser una delicia para los estrategas y amantes del género. Es más, hasta me lo compré original (segunda mano) en la cual venía en una de esas cajas gigantes de antaño, junto a su manual y unos papeles con los árboles tecnológicos e unidades de las facciones. Todo muy, muy epic.

No hace falta recordad, visto el trailer, que el cabrito quería codearse con los grandes como Starcraft. No lo consigue ni de lejos, pero es una alternativa jugosa. Desaprovechada, sí, pero finalmente rayando un notable si no fueran por ciertas características que ensombrecen el genial producto que se esconde detrás de esta joya en bruto.

Como diría Spock: Live long... ¡and prosper!

1 comentario:

  1. ¿Me ha parecido leer "pizza"? pedocañ

    Oye, pues tiene buena pinta. Me parece raro que no lo mencionaras cuando estábamos buscando RTS a los que jugar, la cual cosa fue un completo fracaso. Al final el AoE2 nada, True que no juega al Tzar, al Dune 2k no jugaba nadie, Dani lageando Yuri's...

    Ay madre mía, y el Josh con el Ask. En fin, ya hablamos cuando sea, Iron Blue Intention .table

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